Ya no puedes emprender más aventuras por tu cuenta,
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encaminadas a superar una supuesta insuficiencia.
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Sosteniendo esta cansina historia de intentos fallidos,
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espacio cálido y acogedor en el que descansas,
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mientras las antiguas estructuras que erigiste en mi seno se tambalean.
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En mi transparencia ilimitada que abraza tu cansancio,
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se desintegran ahora las viejas edificaciones que ya no son tu hogar.
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¿Dónde están aquellos sólidos muros que parecían separarte del inmenso espacio?
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El aire corre ahora entre las viejas columnas
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que también se tambalean, resquebrajándose.
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